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¿Quién debe quedarse con los hijos luego de un divorcio o separación? En Ecuador, lo hacen el 95% de las madres, esto debido a que el Código de la Niñez y de la Adolescencia determina que las mujeres tienen preferencia, ante la justicia, para quedarse como encargadas de la crianza de los hijos.

En abril 2015, Farith Simón, abogado y catedrático, interpuso ante la Corte Constitucional (CC) una demanda de inconstitucionalidad sobre dos numerales del artículo 106 del Código de la Niñez.

Numeral 2: ante la falta de acuerdo de los progenitores o si lo acordado por ellos es inconveniente para el interés superior del hijo o hija, la patria potestad de los que no han cumplido 12 años se confiará a la madre. Salvo que se pruebe que con ello se perjudica los derechos del menor.

Numeral 4: Si ambos progenitores demuestran iguales condiciones, se preferirá a la madre, siempre que no afecte el interés superior del hijo o la hija.

 Viola el principio de igualdad

Santiago Villarreal, fundador de Coparentalidad Ecuador, menciona que la preferencia materna contradice a la Constitución que destaca que “para el cuidado, crianza y protección de los hijos se deberá corresponsabilizar al padre y madre en igualdad de condiciones”.

Además, según Villarreal, el Código de la Niñez (art 106) no cumple con los conceptos de igualdad y no discriminación. “Aquí lo que se está haciendo es perpetuando a la mujer, en un rol discriminatorio que debe ser la única que debe ser el tema de cuidado, crianza y tareas del hogar por el tema de los hijos (…) se discrimina a los padres y se nos otorga el rol de proveedores económicos y visitantes de nuestros hijos”.

Actualmente, la CC avocó conocimiento de la demanda y lo que corresponde  “es que resuelva”, agrega Villarreal.

Cambiar leyes no cambia problemas sociales

Sybel Martínez, vicepresidenta del Consejo de Protección de Derechos de Quito, dice que cambiar leyes no cambia los problemas sociales. “La Corte Constitucional debería analizar el contexto en el que se desenvuelven hoy, niños, niñas y mujeres”.

Martínez dice que 9 de cada 10 mujeres divorciadas han sufrido algún tipo de violencia de género y “la mayoría se han quedado con sus hijos”.

Según el INEC, el 65% de mujeres en Ecuador ha sufrido al menos un episodio de violencia a lo largo de su vida. El porcentaje se incrementa hasta el 70% en mujeres separadas o divorciadas.

Por ende, según la abogada- activista, la preferencia materna es dable. Pues, desde las juntas de protección de derechos se ha determinado que “la violencia como forma de disciplina es utilizada, en recurrencia, por progenitores varones”. Además, dice que el Estado, a través de su sistema judicial, no ha logrado proteger a las madres víctimas de violencia, ni ha protegido a los niños.

Villarreal no niega que existan hombres que violentan a sus parejas y a sus hijos. Pero critica que el sistema judicial no haga esfuerzos por determinar los casos donde es al revés. “Al final del día quienes determinan los derechos de los niños son las madres”.

Según Villarreal, los jueces preguntan a las madres si están de acuerdo con los horarios de visitas que emiten los informes técnicos tras un divorcio.

Labor del sistema judicial

 Si en algo coinciden Martínez y Villarreal es que el sistema judicial debería trabajar con mayor determinación en conocer cada caso. Martínez dice que la preferencia materna no elimina que un padre pueda tener la potestad de un  niño, sino que los jueces no actúan con enfoque de género y ni siquiera piensan en el bienestar del niño, sino bajo el sesgo de que es la mujer la que debe criar a los hijos; por el simple hecho de ser mujer. (AVV)

Según el anuario de matrimonios y divorcios del INEC,  un 5% de padres, abuelos y tíos tienen la potestad de los hijos.