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Respaldo al fin de la Senain, pero con una investigación
Asambleístas de diferentes bloques políticos apoyan la eliminación de la Secretaría Nacional de Inteligencia (Senain) anunciada la noche del lunes por el presidente de la República, Lenín Moreno. Sin embargo, consideran que no basta con esa medida sino que se debe investigar a fondo todo lo relacionado con el funcionamiento y el uso de recursos de este organismo, al que califican de instrumento de persecución que recurrió al espionaje político en contra de la oposición durante el Gobierno de Rafael Correa. “Falta saber cómo se gastaron 330 millones de dólares en espionaje y en inteligencia. A quiénes espiaron, a quiénes financiaron. 330 millones gastados en espionaje es una cantidad descomunal y sobre ello tendrán que dar explicaciones los que utilizaron esos recursos”, declaró el asambleísta Luis Fernando Torres (PSC).
Fabricio Villamar, de CREO, añadió que, más allá de la auditoría a los recursos, se debe dejar en claro a qué estuvo dedicada la Senain el tiempo que ha venido funcionando y analizar la información que está en su poder.
Por su parte, Raúl Tello (Unidos por Pastaza) agregó que la eliminación del organismo no debe ser solo en función de la austeridad a la que se refirió Moreno, sino para garantizar las libertades y defender la institucionalidad que, asegura, se vio afectada por “esta policía política secreta que instauró el correísmo”.
° Si bien hay la decisión política de eliminar esa Secretaría se debe seguir un procedimiento, aseguran los asambleístas. La Senain fue creada a través de la Ley de Seguridad Publica, vigente desde septiembre de 2009, por lo que se la debe eliminar a través de la misma vía, reformando la normativa.
Fabricio Villamar aseguró que con esta reforma las competencias que tiene la Senain deberán ser asumidas por inteligencia de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional para garantizar la seguridad nacional en una labor coordinada. “Las cosas en Derecho se deshacen como se hacen”, comentó.
César Litardo (PAIS) considera que la labor de inteligencia no puede desaparecer, por lo que propone como alternativa la creación de una institución adscrita a la Presidencia. “El país debe tener una oficina de inteligencia pero que esté enfocada hacia la lucha contra la delincuencia, el terrorismo y otros tipos de delitos que afectan a Ecuador”.
Fuente:http://www.lahora.com.ec
