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Los cuerpos de los periodistas asesinados llegaron a Quito

Una emotivo recibimiento tuvieron los cuerpos de Javier Ortega, Paúl Rivas y Efraín Segarra, miembros del equipo periodístico del diario El Comercio, secuestrado el pasado 26 de marzo por la organización delictiva autodenominada Oliver Sinisterra, liderada por alias ‘Guacho’.

El asesinado del grupo de los comunicadores se le atribuye a la misma red narcodelictiva integrada por disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Los cadáveres arribaron en un avión de la FAE. Dos vehículos sisterna de la terminal aérea formaron un arco con chorros de agua a presión para dar la bienvenida a la aeronave. Antes de entrar a las tres carrozas fúnebres, los restos pasaron por una calle de honor armada por las familias de los periodistas.

En las afueras de la Sala Protocolar del Aeropuerto Mariscal Sucre de Tababela también los esperaban amigos, compañeros y parientes. Nadie podía ocultar el dolor que se reflejaba en sus húmedas miradas.

Pasaron 88 días para que los familiares de Ortega, Rivas y Segarra así como la opinión pública supiera algo sobre el paradero de los cuerpos.