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Esmeraldas ofrece las mejores fiestas frente al mar

Llegar a la ‘Provincia verde’ es fácil y divertido. En el carro familiar, respetando los límites de velocidad y disfrutando los paisajes del trayecto, Quito-Esmeraldas, el tiempo de viaje no supera las cinco horas con 30 minutos. En bus de transporte (12 dólares el pasaje), antes de siete horas.

El primer cantón que le da la bienvenida, utilizando la ruta central Quito-Santo Domingo, es Quinindé, la zona palmicultora. Allí está ‘La Puntilla’, el lugar donde confluyen los ríos Blanco y Quinindé, para formar el majestuoso ‘Esmeraldas’. En Quinindé, comer un plato de guaña, pescado de costra dura y carne suave, es un ritual obligatorio. Cuatro dólares cuesta el mejor encocao del cantón.

Siguiendo el rumbo del viaje que lo llevará a 21 playas de la provincia, se econtrará con la gente negra en su cotidianidad: riéndose, caminando con sus hijos junto a la carretera, vendiendo productos gastronómicos, e incluso, guiándole para que llegue seguro.
Precauciones
Desde el 20 de diciembre, la Agencia Nacional de Tránsito (ANT) hizo un pacto por la seguridad con los transportistas, para que respeten los límites de velocidad, circulen con las llantas, parabrisas y frenos en buenas condiciones. La Policía, con los agentes civiles municipales de Tránsito se ubicarán en sectores estratégicos.

El operativo se mantendrá hasta el primero de enero, fecha en la cual todos los visitantes retornen a casa.  Mientras tanto, en Atacames, el cantón del sur de Esmeraldas, el más visitado por los amantes de la diversión junto al mar, ha hecho mejoras en cuanto a imagen.

“Los operadores turísticos están listos para recibir a las personas. No hay incremento en los precios de la gastronomía ni hospedaje”, afirmó la directora de Turismo del  Municipio de Atacames, Nancy Bazurto, tras destacar que han promocionado en diversas provincias del país las bondades del cantón, ubicado a 334 km desde Quito, “la playa más cercana desde la Capital”.

Pero pasar por Santo Domingo y Quinindé no es la única forma de llegar a Atacames. Por el norte también es posible. Se dirige hacia Ibarra, y desde allí se empieza un descenso hasta San Lorenzo, donde se evidencia el contraste de la verde vegetación de la Costa con la serranía.
Comida de la mejor 
San Lorenzo también es un buen lugar para disfrutar de las fiestas. Allá, la gastronomía, basada en animales extraídos junto al manglar y en ‘río abierto’, motiva a quedarse. Los encocaos de concha, camarón y pescado, acompañados con plátano majao, no superan los 4,50 dólares. La habitación de hotel cuesta desde 10 dólares por persona.

Un poco más al sur está el cantón Rioverde, donde se gestó la Independencia de Esmeraldas el 5 de agosto de 1820, aunque varios historiadores afirman que fue el inicio de la Independencia de Ecuador. Por eso, el 5 de agosto cuando celebren el Bicentenario, se lo volverán a decir a todos a través de actos públicos y a funcionarios gubernamentales.

Y es justamente en Rioverde donde están los platos típicos con los nombres particulares: ‘Tres sin sacar’, ‘Pasión del mar’, ‘Enganche’, ‘Cevicangre’, entre otros. ¿Cómo encontrarlos? Es lo mejor de la aventura, ya que solo al preguntarle a un parroquiano desde la ventana de su auto, él lo guiará amablemente; también hay letreros que anuncian la ruta culinaria. (MGQ)

Espacio familiar 
° El ciclo de viaje termina en la ciudad de Esmeraldas, capital de la ‘Provincia Verde’, donde está el más moderno de los malecones junto al mar de Ecuador. 54 millones hicieron posible el espacio público ideal para la familia y los apasionados de hacer piruetas en bicicleta.

El patio de comida también tiene una gran área en el malecón, al igual que los lugares de diversión nocturna. Similar a los cantones, la estadía de los hoteles y hostales va desde los 10 dólares. Todavía hay espacio. En algunos se incluye piscina y vista al mar, ideales para recibir al nuevo año.

Fuente:http://www.lahora.com.ec