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En Urdesa, los dueños de negocios y clientes ven con alegría que vuelve el movimiento

Decenas de negocios en Urdesa se reactivan después de que anunciara la fase 1 en el control de la pandemia del COVID-19, según decidió el COE cantonal.

Urdesa, la zona guayaquileña que de ser residencial pasó a ser comercial hace más de unas dos décadas, sobre todo en algunas de sus avenidas principales, deja atrás el panorama de negocios cerrados por efecto de la pandemia del COVID-19.

Ahora, el movimiento es nuevamente intenso; tiene todos sus locales abiertos y los dueños se sienten contentos por esa recuperación. Según información del Municipio, en la ciudadela Urdesa constan 676 tasas de habilitación activas de locales comerciales que registran un último pago entre los años 2016 y 2021.

Desde el 15 de marzo de 2020 hasta este 1 de julio de 2021 se han emitido 31 tasas de habilitación de nuevos establecimientos. Por otra parte, se han dado de baja a 24 de esas tasas por cierre de establecimiento en el período antes referido, esto es en la pandemia.

Fernando Nieto saca panes de sal y de dulce del horno, a una temperatura de 200 ºC. Sale vapor de los esponjosos y crujientes panes que son trasladados a las vitrinas para ser comercializados.

En las tardes, decenas de compradores llegan para abastecerse de diversos tipos de panes, dulces y galletas que ofrece este panadero ambateño de 62 años y muy conocido en esta parte del norte de Guayaquil.

El hombre expresa su alegría. “Nuestro negocio en ventas está bien en términos generales; la gente se acerca a comprar, más aún que ya no hay tantas restricciones”, señala.

Guayaquil está en fase 1 de restricciones en el contexto de la pandemia y por eso los establecimientos atienden sin mayores restriccionessalvo el aforo del 75 %, pues en las noches no hay restricción vehicular y por ello los locales pueden estar más tiempo abiertos.

Este movimiento de usuarios en las calles ahora se observa en diferentes sectores de Urdesa, especialmente, en el principal corredor comercial, a lo largo de la calle Víctor Emilio Estrada.

Igual sucede en parte de Circunvalación y otras calles. Aquí hay numerosos restaurantes, agencias bancarias, locales de diverso comercio, servicios, bares, discotecas, licorerías y demás.

Estas decenas de establecimientos ofrecen sus productos al público con más actividad.

Los negocios en Urdesa abren en estos días desde las 08:00 hasta las 24:00 para que los clientes lleguen con más tiempo a sus locales y disfruten de las comidas o bebidas, especialmente.

“Son $ 6,50, estimada por los dos almuerzos”, dice Samanta Haro, administradora del local Casa Pública, mientras cobra a una señora. Las personas entran a la cafetería y se informan en la pizarra el menú de almuerzos y platos a la carta, entre susurros con sus demás compañeros ya saben qué van a degustar.

“Actualmente en la cafetería hay bastante personas que vienen a consumir, debido que ya no hay reglas a nivel cantonal sobre el horario de cierre y si hay personal se atiende”, manifiesta Samanta.

De igual manera, el restaurante de comida Órale registra un movimiento importante. Es un sitio alusivo a las tradiciones mexicanas y comidas preferidas por el público, dice Peter Andrade, dueño de este negocio, quien destaca que siempre está en constante inspección en su establecimiento para que esté en orden para el público.

Él indica que actualmente les está yendo bien en su restaurante en comparación con algunos meses atrás cuando tenían poca clientela presencial y trabajaban únicamente con el sistema delivery (entrega a domicilio). “Qué bendición. Fue una gran noticia al saber que Guayaquil había pasado a fase 1, eso es un beneficio para el negocio”, afirma Nathaly Macías, esposa de Peter.

“Tenemos tres restaurantes Órale, uno en vía a la costa y los otros en Urdesa y Samborondón y todos se están reactivando”, menciona Peter.

Este restaurante especializado ofrece tacos, quesadillas, tacos al pastor, mix de mariscos, burritos, pozole y bebidas alcohólicas para pasar un buen momento con amigos y familiares. Además, ofrecen shows artísticos con música variada. Es una muestra de cómo la reactivación está presente en esta zona de Guayaquil.

Estos negocios no solamente tienen acogida presencial de los clientes sino también por entregas a domicilio. Desde aquí se despachan pedidos a distintos sectores de la ciudad, sobre todo del centro, oeste y norte de Guayaquil.

Juan Emilio es uno de los clientes que frecuenta Urdesa. Vive en las Lomas y señala que acudir a esta zona para adquirir diversos productos o servicios es “de otro nivel”. Destaca los espacios de parquímetros, donde pueden pagar desde 25 centavos de dólar por el espacio para estacionar su carro por un tiempo determinado.

Además destaca que las personas que visitan los negocios o caminan por las calles cumple en su mayoría con la recomendación de portar mascarilla.

En la Víctor Emilio Estrada se halla un local de Pizza Hut, que tiene una amplia acogida por delivery con las diversas aplicaciones.

Daniel Fiallos, empleado del local, explica que el domingo pasado, en un lapso que no especifica, atendieron a 28 personas presenciales y por delivery 30 pedidos.

“No nos quejamos porque los usuarios ya comienzan a venir y debido a esto hay promociones como dos pizzas medianas con 10 porciones y papas fritas a $ 18,50″, cita.

Para impulsar esta recuperación, el Municipio señala que Urdesa forma parte del Plan Maestro de Guayaquil que contempla una serie de desarrollos en sectores específicos. Así, el objetivo en esta zona específica es combinar su carácter arquitectónico residencial con un corredor turístico que albergue cafeterías y restaurantes.

La avenida Víctor Emilio Estrada forma parte de ese corredor que parte desde Guayarte y continúa hasta Miraflores, que también ha registrado un importante desarrollo gastronómico en los últimos años.

“Este Municipio está consciente de que uno de los sectores más afectados por la pandemia ha sido el de los restaurantes puesto que han soportado restricciones, tanto en su funcionamiento como en el horario de atención. Por ello la alcaldesa Cynthia Viteri dispuso una serie de exoneraciones tributarias con el objetivo de reactivar la economía de la ciudad y también que se permita a restaurantes colocar sillas y mesas en la vía pública sin tener que incurrir en gastos adicionales. Y estos beneficios han ayudado a los locales de Urdesa”, destaca el Cabildo ante una interrogante de este Diario sobre los planes de reactivación de esta zona guayaquileña.

Las papelerías de la Víctor Emilio Estrada y otras calles están con más actividad debido a que algunos colegios están en clases semipresenciales y esto hace que padres de familia acudan a estos establecimientos a comprar los diversos útiles para sus hijos.

Recibimos 70 clientes al día, de madres de familia que se abastecen de productos escolares ya que en algunos planteles educativos están en clases. Me siento agradecida porque ahora está viniendo gente”, comenta Luz María Cedeño, dueña de uno de los locales.

No solamente acuden padres de familia sino también de empresas que llevan una gran cantidad de papeles, agendas, libretas para sus trabajadores.

Otros de los locales que acogen más personas son las ferreterías, donde decenas de clientes del mismo sector y de zonas aledañas acuden para comprar ciertos elementos para arreglar lavamanos, baños y cocinas o todo para sus construcciones.

“Siento que cada día vamos mejorando y siendo más productivos porque atendemos 80 clientes al día”, dice Thomas Carbo, trabajador de una ferretería. (I)

Fuente:http://www.eluniverso.com