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El aborto es penalizado en el país

El aborto en Ecuador no está completamente despenalizado. Es uno de los países de América Latina donde es legal únicamente bajo ciertas causales, que no incluye la violación, a diferencia de Guyana, Puerto Rico, Cuba y Uruguay, donde las mujeres pueden terminar su embarazo en cualquier circunstancia.

Según el Código Orgánico Integral Penal (COIP), las mujeres pueden abortar sin ser criminalizadas cuando se practica para evitar un peligro para la vida o la salud de la madre, o cuando el embarazo es consecuencia de una violación a una mujer con discapacidad mental.

Bajo otras causales, el aborto consentido es penado con uno a tres años de cárcel para quien lo realiza, y con seis meses a dos años a la mujer que lo permite.

Esta restricción legal provoca que las mujeres acudan a centros clandestinos o que se practiquen técnicas peligrosas para terminar los embarazos. Es así que el 15,6% de todas las muertes maternas se da por abortos en condiciones inseguras, lo que representa el tercer lugar de las causas de muerte materna, de acuerdo con el Plan Nacional de Salud Sexual y Salud Reproductiva 2017-2021.

Situación 

El aborto es un problema de salud pública, pues está vinculado a otras problemáticas sociales, que requieren de la aplicación de políticas, pero que se enfrenta a “la negativa generalizada del Sistema de Salud Pública de atenderlo”, sostiene María Dolores Miño, directora del Observatorio de Derechos y  Justicia.

Según organizaciones de mujeres, como Surkuna y Fundación Desafío, los abortos están ligados al embarazo adolescente y a las violaciones sexuales. Así, por ejemplo, señalan que cada día siete niñas dan a luz y otras siete abortan.

En el país, de acuerdo con el estudio Situación de la Niñez y Adolescencia del Observatorio Social del Ecuador, la tasa de parto adolescente en 2016 fue de 51 de cada 1.000 chicas entre 15 y 17 años, y tres de cada 1.000 niñas entre 10 y 14 años. Por eso, las organizaciones han emprendido campañas como ‘Niñas no madres’, promoviendo el aborto.

A esto se añade, dice Miño, que existe una “estigmatización social hacia esta temática o a la mujer que aborta, porque se asume aún que el rol por excelencia de la mujer es ser madre”.

Cambios legales 

En dos ocasiones, en 2013 y este año, la Asamblea Nacional intentó despenalizar el aborto por violación y otras tres causales, pero no obtuvo los votos. Ahora el tema está en la Corte Constitucional, que analiza el veto del Ejecutivo a una disposición transitoria que se incluyó en las reformas al COIP por equivocación y que, según las organizaciones, podría dar paso a que los jueces despenalicen el aborto por violación. Todavía no hay fecha para que eso se defina. (AGO)

Fuente:http://www.lahora.com.ec