“Creo que una prematura declaración de victoria dio a la población un sentimiento erróneo de autosatisfacción” dice a la AFP Ramanan Laxminarayan, del Center for Disease Dynamics, Economic and Policy.
Aglomeraciones
Decenas de miles de agricultores se manifestaron contra las nuevas leyes agrícolas del gobierno nacionalista hindú. Y los masivos mítines, así como las elecciones regionales, tuvieron su responsabilidad en este rebrote epidémico.
A ello se añadieron las muchedumbres que asistieron a festivales religiosos como Durga Puja o Dussehra y sobre todo el de Kumbh Mela en Haridwar, en el Estado de Uttarakhand (norte), que congregó a 25 millones de peregrinos hindúes desde enero, y que dura hasta fines de abril.
No anticipar
Las autoridades no aprovecharon los momentos de reflujo para reforzar el sistema sanitario indio.
Hubiera sido necesario entonces anticipar y “crear reservas de medicamentos antivirales, pero eso no ocurrió” estima Raman Gaikwad, especialista de enfermedades infecciosas en el hospital Sahyadri de Pune.
Los expertos habían advertido desde hace tiempo que India, como muchos países pobres, carecía de suficiente oxígeno médico, vital para tratar los casos graves de covid-19.
La diplomacia de las vacunas
Además, en pleno reflujo del virus en el país, y en un impulso de generosidad y de “diplomacia de las vacunas”, India exportó decenas de millones de dosis AstraZeneca fabricadas en su territorio.
La variante
Muchos atribuyen ahora a la “doble mutación” del virus este rebrote exponencial, con 4 millones de nuevas contaminaciones registradas solamente en el mes de abril en India. (I)