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Mauricio Quiñónez sería víctima de una venganza, según dice la Policía
El asesinato del futbolista ecuatoriano, Josué Mauricio Quiñónez, del conjunto de Independiente Junior, ocurrido en la madrugada del domingo, se habría originado por una venganza.Así lo estimó ayer la Policía de la Zona 8, con las primeras pesquisas realizadas que de manera preliminar descartan el robo como móvil principal.
“No le robaron nada y solo le dispararon desde una corta distancia y luego se retiraron del lugar”, dijo Edison Valverde, jefe de la Dinased de la Zona 8.
La versión se dio a conocer ayer luego de la captura del sospechoso de haber participado en el hecho identificado como Leyther N., el domingo en el interior de un domicilio de la cooperativa “5 de Diciembre”, en la isla Trinitaria.
El jefe policial señaló que los uniformados allanaron dicho domicilio y que sacaron al sujeto mientras se escondía detrás de un ropero.
Luego, la jueza de garantías penales de Guayas, Tatiana Avellán, ordenó la prisión preventiva del sindicado por pedido de un agente fiscal de turno.
Valverde recordó que pasadas las 01h00 del domingo, el deportista llegaba a su domicilio, a bordo de un vehículo Vitara, acompañado de un amigo y fue en ese entonces cuando tres sujetos a bordo de una moto arremetieron contra el jugador disparándole para darle muerte.
Dijo que Quiñónez recibió un impacto de bala en el tórax que le perforo uno de sus pulmones. Su muerte se confirmó en el hospital del IESS, donde lo llevaron los familiares.
Durante la aprehensión del presunto implicado, varios ciudadanos agredieron a uno de los uniformados que se encontraban en el operativo de localización y captura. El gendarme recibió una pedrada en la cabeza, por lo que fue llevado al hospital de la institución.
La versión del acompañante del fallecido dada a la jueza que ordenó la prisión preventiva de Leyther N., ayudó a identificar al sospechoso y a los otros dos sujetos que participaron en el hecho de sangre.
El sobreviviente detalló que Quiñónez había llegado a Guayaquil por el Día de la Madre.
Preliminarmente se barajaba la hipótesis de un robo, pero la Dinased indicó que se trataría de una venganza, pues el hermano del jugador tenía una boleta de captura por un delito.
Se informó que el hermano del jugador era buscado por un asesinato, ocurrido el 1 de enero de 2019, también en el sur de la ciudad. “Presumimos que se trata de una venganza. El hermano del jugador tenía una boleta de captura”, anotó el jefe policial-
Después de esto, sostuvo que el caso está en indagación previa a cargo de la Fiscalía del Guayas.
Los restos mortales de Mauricio Quiñónez, de 18 años, estaban siendo velado en el domicilio de su madre, en el sector de Trinipuerto, donde la camiseta que usó cubre parte del ataúd.
A la casa del duelo llegaron amigos, familiares y compañeros del equipo de fútbol donde militó el jugador. Todos se acercan y observan el cuerpo inerte del volante ofensivo.
La humilde vivienda está asentada en un callejón cercano al Estero Salado.
En el interior de la casa sala su féretro ocupa un espacio considerable y sobre las paredes cuelgan algunas fotografías del jugador. (DAB)
Fuente:http://www.lahora.com.ec
